Fe, resistencia y perseverancia.
El proyecto de Nehemías estuvo bañado de oraciones personales y colectivas. Nunca dejó de poner a Dios en el centro de su labor y de sus metas, asegurando su presencia y protección. Los líderes auténticos, señalan siempre a los seguidores a la única fuente de sabiduría y fuerza, que es el Señor. Su fe es contagiosa, y aunque a veces dudan de su habilidad personal, nunca dudan del poder invencible del Señor.
Pero aconteció que oyendo Sanbalat y Tobías, y los árabes, los amonitas y los de Asdod, que los muros de Jerusalén eran reparados, porque ya los portillos comenzaban a ser cerrados, se encolerizaron mucho; 8 y conspiraron todos a una para venir a atacar a Jerusalén y hacerle daño. 9 Entonces oramos a nuestro Dios, y por causa de ellos pusimos guarda contra ellos de día y de noche.
Nehemías 4:13-14
Siempre encontrarás oposición, es ahí
donde entra la resistencia y la perseverancia. Nehemías soportó las burlas, sospechas, chismes, amenazas, acusaciones falsas, etc. Ninguna de ellas lo movió de la tarea. Ningún líder sobrevive sin paciencia y resistencia, y menos si se permite ser malhumorado, resentido o vengativo.
Nosotros, pues, trabajábamos en la obra; y la mitad de ellos tenían lanzas desde la subida del alba hasta que salían las estrellas. 22 También dije entonces al pueblo: Cada uno con su criado permanezca dentro de Jerusalén, y de noche sirvan de centinela y de día en la obra
Nehemías 4:21-22
Padre, hoy decido ocuparme de mi salvación y crecimiento como líder espiritual de mi generación con temor y temblor, porque tú produces en mi el querer y el hacer, por tu buena voluntad. Y así resplandecer como luminaria en el mundo, asido de la palabra de vida, con fe, resistiendo y perseverando ante la oposición, hasta cumplir con la tarea que me has encomendado. En el nombre de Jesús
Amén
Sin Fe es imposible agradar a Dios
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