Respondiendo a tu llamado.

Respondiendo a tu llamado.

Hacía tres años y medio, que el Señor se había encontrado  con dos pares de hermanos: Simón y Andrés, y Jacobo y Juan; a quienes les había hecho el llamado de sus vidas: Y les dijo Jesús: Vengan en pos de mí, y haré que sean pescadores de hombres. Marcos 1:17

Los cuatro respondieron al llamado, dejando de inmediato sus redes.

En esta ocasión el Señor se proponía encontrarse con Pedro para llevarlo a una reflexión profunda: Cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que éstos? Le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Él le dijo: Apacienta mis corderos. 16 Volvió a decirle la segunda vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Le dijo: Pastorea mis ovejas. 17 Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas. Juan 21:15-18

Pedro había traicionado al Señor y lo había dejado solo. ¿Has negado tú alguna vez al Señor? Esto es, has sucumbido a la vieja naturaleza, temerosa y cobarde, has pecado, o no lo has representado dignamente. Cada día hay una nueva oportunidad para tí, para demostrarle tu amor llevando su palabra a dondequiera que vayas.

Padre, perdóname por haber pecado, por  no haberte representado como tu embajador de reconciliación. Hoy me comprometo a llevar tu palabra y tu amor siempre,  en el nombre de Jesús, amén.
        Creí, por lo cual hable
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