Saturday, February 17, 2018

Creo y confieso por el Espíritu Santo.

Creo y confieso por el Espíritu Santo.

Él está convenciéndonos de que Jesucristo es Señor de nuestras vidas. Es quien nos quita las vendas, la ceguera espiritual, y nos vivifica, para comprender la Palabra, aceptarla y ponerla en práctica. El Espíritu Santo esperó pacientemente hasta atraernos con lazos de amor a Jesús, nos convence de nuestros pecados y nos guía a arrepentirnos y a volvernos a Dios.

Por tanto, les hago saber que nadie que hable por el Espíritu de Dios llama anatema a Jesús; y nadie puede llamar a Jesús Señor, sino por el Espíritu Santo. 1a Corintios 12:3

¿Dónde estarías sin el Espíritu Santo? Él permitió que creyeras con el corazón y confesaras con la boca a Jesús. Sólo así, el Padre pudo hacerte su hijo(a) y sellarte como propiedad suya, poniendo su Espíritu dentro de ti. Es por el Espíritu Santo que llamas a Dios ¡Papá!, y gracias a Él, todos los seres del mundo espiritual reconocen que eres nueva criatura, engendrada por Dios mismo.

No se conformen a este siglo, sino transfórmense por medio de la renovación de su entendimiento, para que comprueben cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Romanos 12:2

Abba, Padre, gracias por la nueva identidad, por la herencia y el destino que me has dado. Hoy decido renovar mi mente, pues está conformada a la vieja naturaleza y alinearla a tu manera de pensar, para que pueda comprobar y vivir en tu buena voluntad, agradable y perfecta. En el nombre de Jesús, amén.
     Creí, por lo cual hable
             Compártelo

No comments:

Post a Comment