Thursday, February 15, 2018

Quiero ser transformado.

Quiero ser transformado.

Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.
2a Corintios 3:18

La Palabra nos enseña que tenemos un Dios maravilloso, que se ha revelado desde la creación. En el Antiguo Testamento lo hizo con nombres diversos, para que pudiésemos comprender sus cualidades y atributos. En el Nuevo Testamento, Jesús vino a mostrarnos al Padre y a abrirnos las puertas de regreso a Él, redimiéndonos de la maldición del pecado, con su sangre. ​​​​​ Y antes de volver al cielo, Jesús dijo que enviará al Espíritu Santo, para guiarnos a lo largo de nuestra vida, revelándonos sus Palabras y glorificándolo. Hoy más que nunca, permitamos al Espíritu Santo continuar revelándonos a Dios, con la Palabra y su poder.
​​
Camina en autenticidad delante del Señor. Permite que su palabra te conforme a su imagen. Permite que la cultura del reino sea el ancla de tu vida y no el viento de las opiniones de los hombres. Niégate a ser manipulado. Rechaza permitir que ideas preconcebidas acerca de quién Dios en tu vida den forma a lo que realmente crees acerca Él. Las tradiciones de los hombres contaminan su verdad. Rechaza todas estas nociones y regresa diariamente, a veces cada hora, al testimonio seguro de su palabra y al torno de su palabra. Conviértete en arcilla bajo sus manos para que te moldee en lo que estás llamado a ser.

Padre, quiero ser  flexible, enviable y usable. Aunque hay muchas enseñanzas y sabidurías excitantes que se presentan como dignas de mi consideración, hoy reconozco que sólo tú eres mi sabiduría. En ti y en lo que eres dentro de mi, tú eres mi sabiduría y mi verdad. Me has liberado de todo protocolo místico y legalismo religioso para tener un acceso especial a tu trono.  Ya soy especial para tí. Me has esculpido en las palmas de tus manos con una punta de diamante. Nunca me dejarás ni me desampararás. Vengo voluntariamente a tí. Aparto las vanidades que se han presentado ante mi en el traje falso de la verdad más profunda. Eres mi todo en todo. Gracias porque me estás cambiando y  transformando por quien tú eres en mi interior hasta tu imagen perfecta. En el nombre de Jesús, amén.
     Creí, por lo cual hable
              Compártelo

No comments:

Post a Comment