Acerquémonos a Dios confiadamente

Cuando el Señor toca nuestra vida tenemos la opción de olvidar lo que ya hizo y continuar viviendo igual, o de caminar por el camino del agradecimiento. Éste comienza con un cambio en nuestros pensamientos y manera de vivir, alineándonos a Sus pensamientos y actuando conforme a ellos. De esta forma podremos comprobar la bondad, misericordia y gracia de nuestro Dios, lo que Jesús ganó en la cruz para nosotros y nos llevará a estar cada vez más y más agradecidos. 

Amado, Jesús nos abrió el camino al Padre, para que podamos  presentarnos  delante de Él confiadamente, con la certeza de que nuestras  oraciones llenas de fe y de Su palabra, serán contestadas:

Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.
Hebreos 4:16

Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. 15 Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.
1a Juan 5:14-15

¡Gracias, gracias, gracias! En el nombre de Jesús, yo lo creo y lo recibo ahora, amén.

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