Monday, August 21, 2017

¿Estoy hablando con fe?

¿Estoy hablando con fe?

El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas. 36 Más yo les digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio. 36 Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado.
Mateo 12:35-37

Cuando de nuestra boca sale la Palabra de Dios, el evangelio de la salvación en Cristo Jesús, los milagros ocurren y las circunstancias cambian. Esto es lo que en la Biblia se llama confesión. Si con nuestra boca confesamos chismes, duda, temor o imposibilidad, no sólo no cambiarán las circunstancias… tal vez empeoren.

La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos.
Proverbios 18:21

Cuando confiesas  enfermedades, un estado de pobre salud, síntomas y dolencias, pobreza, depresión ansiedad, esto será exactamente lo que sucederá. La confesión  te aprisiona o te declara libre. No es tu pensar sino tus palabras y conversaciones las que obran para poder o para debilidad. Lo que confiesas con tus labios domina tu ser. Cuando venga la enfermedad o el problema recházalo, resístelo. No lo confieses. Confiesa lo que Jesús ya hizo por ti en la cruz.

Parecería que estas mintiendo cuando te encuentras en medio de los problemas, pero aunque se vean como ciertos,  la única verdad es lo que Jesús ya ganó en la cruz.

Padre, gracias porque soy de tu propiedad, me compraste por el precio de la sangre preciosa de tu Hijo Jesús. El pecado, la enfermedad, la pobreza, la incapacidad, no tienen parte en mi, no tienen derecho a estar en mi vida. Hoy soy libre de toda maldición, porque Cristo me redimió de la maldición de la ley, haciéndose maldición por mí. Soy salvo, soy sano, soy fuerte, soy próspero, soy libre. En el nombre de Jesús, amén.

   Creí, por lo cual hable
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